En entrevista concedida al diario Austral de Valdivia, el Superintendente de Educación Superior, José Miguel Salazar, abordó por primera vez de manera pública la compleja situación financiera que enfrenta la Universidad Austral de Chile. La autoridad reguladora del sistema de educación superior señaló que “la Superintendencia realiza una permanente labor de supervisión a las distintas instituciones de educación superior del país para detectar riesgos tempranos. Desde esa función, se observó una situación en la Universidad Austral que requiere
atención. La Universidad viene presentando resultados financieros deficientes desde hace algunos años.
“Este arrastre de balances negativos ha estado impactando en los compromisos crediticios contraídos anteriormente por la institución. Producto de ello es que se ha abierto una investigación orientada a conocer con mayor profundidad la real dimensión del problema que enfrenta la institución y proponer medidas para corregir dicha situación”, explicó.
Hace más de un mes pidió un informe a la UACh donde se le solicita aclarar su situación financiera, ¿hay resultados de ese análisis?
-El resultado del análisis de esa información da cuenta que la institución enfrenta un complejo escenario financiero y, por ende, se ha iniciado un proceso de investigación. Se han detectado inconsistencias entre la información que reportó la universidad a mediados del año pasado y la que finalmente presentó a través de los estados financieros correspondientes al ejercicio 2022. En ese contexto, se le requirió a la Universidad información adicional y en base a esos antecedentes se determinó investigar estos aspectos.
¿Y de acuerdo a las observaciones preliminares, es compleja la situación que enfrenta la UACh?
-La universidad presenta pérdidas acumuladas en los últimos tres años que ascienden a $ 28.467 millones, producto de una gestión deficiente en materia financiera y cambios en el escenario macroeconómico. La Universidad Austral enfrenta un escenario que exige abordarlo de forma realista y profunda. Realista porque requiere el desarrollo de acciones institucionales en diversos planos que permitan mejorar la situación financiera de la institución. Y profunda, porque el compromiso y coordinación de la comunidad universitaria es vital para poder enfrentar este escenario. En ese sentido, la Superintendencia va a velar por la construcción de una solución y monitoreará su correcta implementación, resguardando el derecho a la educación de sus estudiantes.
¿Podría haber sanciones a la universidad y en qué casos éstas deberían ser aplicadas. O ya hay sanciones?
-Existen procesos de investigación en curso, por lo que no es momento de hablar de sanciones, sino de soluciones. Las autoridades de la Universidad Austral, al igual que la Superintendencia, entienden perfectamente que no es tiempo para cambios cosméticos. La situación exige abordarla a fondo y así garantizar la sostenibilidad de la casa de estudios en el mediano y largo plazo.